Powered By Blogger

martes, 4 de enero de 2011

Nada...

Nada.
Las manecillas del reloj avanzan.
Nada.
Lo atraigo hacia mi y nos abrazamos.
Nada.
Lo siento temblar y le susurro palabras al oído.
Nada.
Le digo que lo amo por última vez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario